Comencé a una nueva etapa en Substack, no se cuánto durará y si prosperará.
Me van a encontrar en Nada en Especial.
Iré mudando algunas publicaciones antiguas que considere relevantes y las próximas publicaciones estarán en ambas plataformas por un tiempo pero la idea es cerrar (no borrar) este blog ya que creo que ha cumplido su ciclo.
Cuando había comprado mi última notebook, una Thinkpad, me había fijado que tuviera puerto USB C. Para sorpresa y decepción mía, el único puerto USB C, era el Thunderbolt para alimentar a la misma, por lo que en realidad NO tenía un puerto para usar.
Mi caso de uso era un hub que pudiera alimentar a la notebook y que además permitiera enchufar discos, celular y eventualmente algún monitor portátil.
En mis búsquedas, encontré algunos hubs que parecían gabinetes que ofrecían múltiples posibilidades: HDMI, Ethernet, VGA, etc.
Localmente no encontré ninguna opción y en Mercado Libre, lo que se conseguía era por compra internacional, por lo que decidí buscar en Amazon y di con el dispositivo que se adaptaba a mis necesidades y a un precio razonable. Como siempre, el servicio de Amazon es excelente y en menos de 10 días ya tenía la compra en Chile.
El hub es de la marca Plugable y es de 60 W, por lo que alcanza perfectamente para alimentar a la notebook y otros dispositivos. Trae una fuente de 100 W que más que fuente parece un ladrillo. Una de las opciones por la que lo elegí es que puedo usarlo con 220 V. Sabía que el formato de enchufe era de Estados Unidos, así que ya tenía un adaptador para Chile.
El hub trae:
Según leí se banca hasta 2 monitores (que no tengo) 4k.
Por el momento me ha funcionado sin problemas con lo siguiente:
En otro escenario, enchufé los auriculares USB C para celulares de marca AKG y funcionaron sin problema.
Por el tamaño de la fuente, no me atrevo a decir que es para uso portátil sino más orientado para escritorio, donde uno posea un par de monitores y otros dispositivos que superen la cantidad de puertos (solo 2 USB) que trae esta notebook.
Inicialmente podría decir que es un buen producto, el tiempo dirá. Tiene garantía de 2 años.
Hay un documental compuesto de 6 capítulos animados, de poco mas de 10′, producido por el canal europeo Arte.TV muy interesante sobre Satoshi Nakamoto, el creador de Bitcoin. Si uno no conoce la historia de este, podría catalogarla como de alguna película de ciencia ficción.
Por algún motivo que desconozco, este documental no está disponible para verlo en esta región, por lo que hay que verlo con VPN conectada solo a Europa (ni Estados Unidos ni Asia). Dejo enlace aquí:
Muchos dicen que es una cosa de nerds, que es una estafa, un producto de especulación, un ponzi. Lo que es cierto, es que actualmente, no todos están preparados ni tienen intención de usarlo, lo cual es totalmente aceptable.
Desde la caída de las Torres Gemelas en 2001, los gobiernos han ido avanzando cada día más sobre las libertades y la privacidad de la gente. Han deprimido la economía y uno se siente un boludo porque cada vez se pagan más impuestos para que después los Bancos Centrales vengan a emitir más moneda.
Han convertido a la Internet en un gran marketplace donde lo único que uno hace es comprar. Muy en un menor porcentaje han quedado los sitios académicos y los foros donde se utilizaba para el intercambio de conocimiento.
Las redes sociales se han convertido en una herramienta de vigilancia en donde la opinión fuera de la línea editorial es censurada y las cuentas bajadas, incluso de la de un ex-presidente del supuesto país más libre del mundo.
Haber conocido Bitcoin fue como tomar la píldora roja y haber comprendido el valor del dinero, la vigilancia y el control estatal omnipresente, la centralización del poder capaz de bloquearte una cuenta y ver que existe la posibilidad de no depender de un historial crediticio para tener un producto financiero. Falta muchísimo, en el camino han ocurrido muchos desastres con especuladores que se aprovecharon de la terminología «blockchain» y «crypto».
Creo que ni siquiera hemos visto el primer paso, solo un gateo.
Hace un tiempo atrás di con el perfil de un tuitero llamado ホリーニョ (@horinyo).
El mismo se dedicaba a colorear fotos de la pre y post guerra en Okinawa. Si bien no es nacido en isla ni pareciera ser descendientes, tiene un gran amor e interés por la isla.
Tomó muchísimas fotos de la oficina del archivo fotográfico de Okinawa y las coloreó utilizando alguna técnica de inteligencia artificial. Tal fue la recepción de éstas que el periódico Ryukyu Shimpo le hizo una nota.
La verdad que todas las fotos me parecen maravillosas y son un registro histórico importantísimo pero quiero compartir las que más me movilizaron.
A pesar lo sufrido en la guerra y el ataque de las fuerzas norteamericanas, mi abuela paterna siempre decía que los soldados norteamericanos, por lo lejos los trataron mejor que los mismos soldados japoneses que los trataban como ciudadanos de segunda e incluso los obligaban a cometer suicidio.
Fotos de la guerra.
Fotos de la postguerra
Me contacté con él por Twitter y tuvimos un intercambio muy ameno. Le pasé una vieja foto que tenía de la tintorería de mi viejo y me la coloreó. Tintorería Kyoto, circa 1960.
Algunos datos color: Okinawa estuvo bajo administración norteamericana y fue devuelta a Japón en 1972 después de la guerra de Vietnam (la misma sirvió y sirve como base).
Hasta esa época, el sentido del tránsito era en el sentido occidental que estamos acostumbrados todos. Por lo que hubo que cambiar el sentido de las calles, ubicación de los semáforos y obviamente, los conductores se tuvieron que acostumbrar a manejar al revés, a pesar que el volante seguía del lado izquierdo.
La dieta en Okinawa es bastante diferente al resto del país y ha sido influenciada por la dieta norteamericana. Todavía existe la cadena de comida rápida A&W (All American Food), famosa por su cerveza de raíz o root beer y su estética sesentosa de postguerra. En ningún otro lugar de Japón creo que exista esta cadena y es posible que muy pocos norteamericanos la conozcan.
Amo Japón pero hay normas sociales con las que no comulgo y tal vez por eso me surge un signo de interrogación cuando alguien me pregunta «¿te irías a vivir/trabajar a Japón?».
En este video, Shogo, un youtuber, artista marcial y amante de la cultura japonesa, nos hace un muy interesante análisis de por qué la sociedad japonesa es como es debido a: catástrofes naturales, ser una isla y aplicar una filosofía colectivista medieval (bushido).
El video se titula «Why BUSHIDO Is The Root of All Social Problems in Japan» o «¿Por qué el bushido es la raíz de todos los problemas sociales en Japón?».
Esta filosofía les ha ayudado a tener orden, paz y sobrevivir en el pasado cuando Japón estaba aislado aplicando un gran sentido de comunidad. Es admirable ver cómo el país se reconstruye después de alguna catástrofe ya que hay un gran espíritu colaborativo y de trabajo en equipo.
Sin embargo, el mundo globalizado se ha tornado muy dinámico y aquellos países que lideraban tranquilos el podio de potencia mundial, han quedado en la anécdota.
Viendo este video me cayó la ficha de los conceptos uchi (dentro del grupo) y soto (fuera del grupo) que aprendí en mis clases de japonés, como también el sistema de escalas honoríficas (reigi) que modifican el idioma al punto de hablar humillándose (keigo).
Una vez, leí en una revista japonesa que circulaba en los centros de estudios de idiomas en Japón, que fue un shock para muchos empleadores, cuando empleados extranjeros (en ese caso eran chinos y occidentales), enviaban e-mails en un japonés gramaticalmente correcto pero sin apegarse a estas engorrosas y complicadas reglas de cortesía. Dicho de paso, es muy común que incluso entre los japoneses, no se usen correctamente estas reglas de cortesía que implica reemplazar verbos y pronombres.
La palabra que uno va a escuchar siempre de un japonés, es ganbaru (esforzarse) para mejorar lo que se hace y así alcanzar el máximo nivel de lo que uno pueda dar, ya sea servicio o producto. El problema es que a veces, adoptar este camino puede llevar a estrellarse hacia un muro. Incluso sabiendo que el objetivo puede ser desastroso, los empleados japoneses no contradicen a sus senpai (el que está arriba de uno) o sus jefes.
Y es por eso que últimamente Japón crece poco. Es ese intento por insistir con lo pre-existente y tratar de no plantear una opinión a la autoridad, lo que no los hace cambiar.
Japón tiene el gran desafío de no quedarse anclado en el pasado pero a la vez rescatar lo bueno de sus tradiciones. [EMO] Debe tomar el concepto de ser resistente y flexible como el bambú.
Hacía mucho que no publicaba algo. A este artículo lo venía pensando de hacía tiempo y no me decidía solo por un motivo: corrección política.
Entonces me acordé de mis épocas donde escribía, me puteaban y todo me chupaba un huevo. Sin embargo estos últimos años, ha habido un incremento generalizado de autocensura ya sea porque uno opina diferente del mainstream o porque te cae una horda de trolls a putearte.
Seguir leyendoCae una lluvia copiosa el fin de semana en Santiago. La novedad es que es pleno verano. ¿Quién lo hubiese imaginado? En mis casi 8 años viviendo en la ciudad trasandina jamas vi llover así.
Teniendo las libertades parcialmente coartadas, las opciones son: rogar que no se corte la luz para poder ver nuestra serie favorita, hacer cucharita o tratar de saciar el hambre.
Si con lo único que se puede cucharear es con la almohada, o como en mi caso que estaba hambreado, la opción es hacer pan. Qué alimento más noble y peligroso.
La siguiente es una receta que ví en Facebook (yo no inventé nada) y me gustó porque el pan queda esponjoso, con un sabor parecido a un scone.
Ingredientes (para dos moldes):
Pasos:
Un suicidio; recuerdos de la reconstrucción de una Nagasaki post bomba atómica y el cambio de paradigma dentro de la sociedad japonesa. Etsuko revive momentos de su pasado y la relación con su vecina Sachiko.
El párrafo anterior sería un argumento básico que pudieran encontrar en la contratapa de este libro. Sin embargo, al terminar de leer «Pálida luz en las colinas / Pale view of hills» de Kazuo Ishiguro, me quedé con la sensación que estaba ante un rompecabezas con muchas piezas faltantes.
Seguir leyendo¿Qué argentino viviendo en el exterior no sintió alguna vez nostalgia de los sabores e hizo empanadas o alguna tarta de jamón y queso?
Por suerte en Chile, Wal-Mart/Líder vende discos de tarta y empanadas de origen argentino, uruguayo y chileno. Por calidad de la masa, y por gusto prefiero la uruguaya (Avanti) o la argentina (marca Líder).
Lo curioso es que conocidos locales, teniéndolos a mano ninguno ha preparado o tartas (conocidos aquí como quiches) o empanadas (ni siquiera una empanada de pino).
Pero el motivo del post era sobre los fosforitos.
Seguir leyendoPensaba escribir antes hace tiempo pero lo fui posponiendo pensando que íbamos a progresar con las fases pero resulta que hemos retrocedido a fase 2 de manera transitoria y para que este post no siga envejeciendo mal, decidí no perder mas el tiempo y publicar algunos lugares de Barrio Italia que tienen las puertas abiertas a pesar de haber sido un año muy duro.
Nada en especial 